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Seres Mitológicos Griegos: Criaturas de la mitología griega

Las mitologías no solo están compuestas de dioses, sino también de un gran número de seres fantásticos que conforman un universo pletórico de vida, poderes y enigmas. A continuación, en sintonía, presentamos los principales seres mitológicos griegos: información e imágenes. 

Criaturas mitológicas griegas

La mitología griega no solo nos inunda de dioses antropomórficos (con cualidades humanas), sino también en un mundo donde intervienen una multitud de otros seres, acompañantes de las divinidades, aliados o enemigos de los seres humanos, seres intervinientes, absolutamente excluidos o con funciones muy específicas.

Ninfas

Las ninfas son seres mágicos de la naturaleza, representadas como jóvenes encantadoras. Ellas solían estar relacionadas a lugares específicos: fuentes, lagos, arroyos, palacios, bosques, entre otros sitios.

Eran seres inteligentes, pacíficos y muchas veces vinculados con un arte singular (pensemos la danza o la música como ejemplos). Si bien se las observa como enemigas de la violencia, el resto de los seres las respetaba porque podían llegar a ser peligrosas: cegar o herir de muerte a sus oponentes.

Eran seres que defendían determinados sitios e incluso tenían capacidades de curación, como por ejemplo, sobre animales. Podían secundar o ayudar a otras deidades como Artemisa, solían estar desnudas o semidesnudas. Una buena definición de ellas es presentarlas como divinidades menores adscritas a un sitio.

Gorgonas

En la mitología griega una gorgona era un despiadado monstruo femenino, pero también estaba asociado a los cultos más arcaicos como divinidades protectoras. Su poder era tan grande que cualquiera que intentara mirarla quedaría petrificado, por lo que su imagen se encuentra en todo tipo de lugares: desde templos hasta crateras de vinos.

Mitos posteriores nos recuerdan que las gorgonas eran tres: Medusa, Esteno y Euríale. La primera era la única mortal, la cual tenía serpientes venenosas en lugar de cabello como castigo de Atenea. Si bien en escritos homéricos ya se menciona, tal vez la figura de semejante ser mitológico haya adquirido gran fama a través de la obra de Ovidio, La Metamorfosis.

Si bien pueden ser representadas con alas de oro, garras de bronce y colmillos de jabalí, sus atributos más comunes son los dientes y la piel de serpiente.

Cíclope

Los cíclopes son otros seres mitológicos griegos muy conocidos, con un tamaño gigante, una gran fortaleza y algo rudimentarios o tercos. Su rasgo llamativo es que poseían un solo ojo en el medio de su frente, el cual tenía tan grandes poderes que podía desintegrar cualquier cosa con el solo hecho de ser mirada.

Suelen dividirse a los cíclopes en dos generaciones: la primera, más benigna, eran tres hermanos hijos de Urano y Gea, conocidos por ser artesanos y constructores; la segunda surgió por las gotas de sangre que cayeron sobre Gea, cuando Cronos estaba castrando a su padre Urano (a ella pertenecía el gigante Polifemo).

Centauro

Los Centauros son conocidos por ser mitad persona y mitad caballos, con una enorme habilidad con arcos y flechas. La mitología griega nos lo presentan como seres que habitaban bosques, prados y montañas, en donde cazaban solo necesario para vivir.

Eran seres que vivían en una gran armonía con la naturaleza, pues si talaban árboles para fabricar sus arcos luego volvían a sembrarlos. Asimismo, eran sumamente fuertes, ya que su capacidad animal era notoria; pero eso no quitaba que contaran con habilidades algo más espirituales: adivinación y telepatía.

Cerbero

Cerbero era el perro de Hades, un monstruo de tres cabezas (a veces se mencionaban hasta 50 o 100) y una serpiente en lugar de cola. Este ser mitológico guardaba la puerta del Hades o inframundo griego, asegurando que los muertos no salieran y que los vivos no pudieran entrar.

Esta criatura era hijo de Equidna y Tifón, además de ser hermano de Ortro. Es conocido por ser parte del último de los doce trabajos de Heracles, en el cual era capturado. Una criatura así, por otro lado, se puede observar en otras mitologías: en la nórdica Garm cuida las puertas del Helheim.

Esfinge

La Esfinge era una criatura mítica de destrucción y mala suerte, representada con rostro de mujer, cuerpo de león y ala de ave. Hesíodo, poeta antiguo griego, fue el primero que la menciona, haciéndola hija de Quimera y Ortro, el terrible perro hermano de Cerbero.

Es llamativo que la Esfinge para algunos era única y de ascendencia divina, mientras que para otros (Plinio el Viejo) era una suerte de animal, habitante de las zonas más remotas de Etiopía y poseedora de un pelaje pardo rojizo. Se la denominaba «ruina de los cadmeos», aludiendo a aquellos tiempos en que llegó desde la lejana Etiopía para causar terror en los campos que circundaban Tebas.

Minotauro

El minotauro era un ser mitológico con cuerpo de hombre y cabeza de toro. Su nombre significa «toro de Minos», concebido en la unión de Pasífae y un magnífico toro con motivo de una afrenta divina.

Es muy conocido el minotauro por el hecho de haber sido encerrado en un laberinto, diseñado por el mismo Dédalo. Este suceso lo retenía en la ciudad de Cnosos, en la isla de Creta. Durante muchos años hombres y mujeres eran enviados al laberinto para ser devorados por la criatura. Semejante realidad terminó con la muerte del minotauro a manos del héroe Teseo.

Sirenas

 

Las sirenas son criaturas marinas que existen en múltiples leyendas y mitologías, entre ellas la griega. Sin embargo, hay un hecho curioso que aclarar: las sirenas griegas y otras antiguas como las egipcias no eran pisciformes (rostro de mujer y cuerpo de pez), sino seres híbridos con torso de mujer  y cuerpo de ave. Entonces la escena de Ulises luchando contra su encanto debe ser entendida de otra manera.

Más allá de las divergencias fisonómicas de los distintos tiempos, eran criaturas femeninas, con una capacidad de encanto (a partir de su voz melodiosa) que podían llevar a cualquier hombre a la muerte (si no superaban la tentación). Su lugar eran las islas rocosas, a veces identificada con la italiana Capri.

Sátiros

Los sátiros eran seres mitológicos masculinos que solían acompañar a dioses como Pan y Dioniso, vagando por los bosques y montañas. Para Hesíodo eran criaturas inútiles e incapaces de trabajar, más allá que intervenían en cortejos divinos o simplemente andaban en soledad.

Eran representados como criaturas alegres y pícaras, un carácter festivo que de todas maneras se podía volver algo violento y desenfrenado. Como están vinculados con Dioniso son amantes del vino, las mujeres y cualquier tipo de placeres físicos.

Si bien se los suele confundir con silenos, panes o faunos, eran criaturas grotescas que andaban desnudas, algo humanoides; pero también con patas y orejas de macho cabrío o de caballo, cuernos de macho cabrío, cola de caballo, nariz chata y frecuentemente itifálicos, es decir, relacionado con el pene.

Pegaso

Pegaso era en la mitología griega un caballo alado, nacido de la sangre derramada de Medusa cuando Perseo (otro héroe fundador de ciudad como Teseo) le cortó la cabeza. Es totalmente blanco y cuando surca el aire mueve las patas como si en realidad estuviera corriendo.

Suele estar relacionado con Belerofonte, quien a lomo del equino alado venció a la espeluznante Quimera, bestia de múltiples cabezas que asolaba los territorios de Licia.